Páginas

domingo, 19 de octubre de 2014

CROQUETAS DE POLLO

¿A quién no le gustan las croquetas?

Pues a muy poca gente seguro!! Este manjar es más viejo que "hacer popó sentado", típico de la mayor parte de abuelas... O por lo menos de las abuelas que yo conozco jaja!!
Se pueden hacer de un montón de cosas, como por ejemplo setas, jamón, cocido, bacalao... Y todas ellas deliciosas!!

En mi caso las hice de pollo, porque tenía un trocito de pollo a l'às en el congelador, y decidí que ese era el mejor futuro que le podía esperar.

No soy muy de recetas "paso a paso", pero alguna fotillo del proceso si que os puedo colgar.

Vamos a por ella!

INGREDIENTES



  • 1 litro de leche 
  • 100 g de harina
  • 50 g de mantequilla
  • 1 pechuga de pollo 
  • Sal
  • 1 cucharadita de nuez moscada
  • 1 pastillita de concentrado de pollo (en el caso de que el pollo no esté cocinado previamente, que entonces lo ideal es utilizar el "suco" del mismo)

PREPARACIÓN

Desmenuzamos el pollo, para que quede en trocitos finitos. Este paso es ideal hacerlo con las manos, porque el pollo queda en tiras muy finas,

Vertemos el litro de leche en una cazuela poco profunda o en una sartén. La llevamos a ebullición, y entonces añadimos la sal, la nuez moscada y el pollo desmenuzado,

Dejamos cocinar a fuego lento unos 20 minutos, removiendo de vez en cuando. Pasado este tiempo, la leche debería de hacer "chup chup" no hervir, y será entonces cuando muy poco a poco añadiremos la harina, sin dejar de remover, para que no se hagan grumos. Esto es casi casi imposible, algún grumillo siempre nos quedará, pero la idea es que sea lo más pequeño posible. 

La idea al añadir la harina para que ligue y tome consistencia. Seguramente no necesitéis utilizarla toda. Poco a poco la mezcla debería tener una consistencia espesa pero fina, que no quede en bloque y que caiga "tipo caramelo" cuando volquéis la cuchara. Ésto va por gustos, hay a quién le gusta más la bechamel muy espesa y a quién le gusta más líquida, aunque para hacer las croquetas lo recomendable será más bien lo primero. En el caso de que se queda muuuuy compacta, añadir un poquito de leche (aún en el fuego) y ajustar la consistencia.

Este es el momento de probar la masa, para rectificar de sal y si os gusta mucho, de nuez moscada.

Retiramos la sartén del fuego y vertemos la mezcla en un recipiente y cubrimos con un film transparente (tocando la masa) y dejamos enfriar, preferiblemente a temperatura ambiente.

Se puede dejar de un día para otro, pero en el caso de que las queráis para el mismo día, dejar reposar mínimo 3 horas. 

FORMAR LAS CROQUETAS

Antes de dar forma a las croquetas preparamos un plato con harina, otro con huevo y otro con pan rallado. Yo gasté casi 3 huevos batidos y el pan rallado era casero, de pan que había hecho en casa y ralladito por mi super masterchef jeje. Observación: no es obligatorio que ralléis el pan vosotros. 

Ahora, vamos a la parte más "complicada". Nos untamos las manos con un poquito de aceite (podéis poneros unos guantes de látex, es una forma menos sucia e higiénica) y con una cuchara cogemos un poquito de la masa. Nos la ponemos en las manos y le damos la forma que más nos guste, un cilindro alargado o una bolita, o sin forma. Primero las pasamos por harina, seguidamente de huevo y para finalizar rebozamos bien en el pan rallado. 

Las disponemos en una bandeja, intentando que no queden las unas sobre las otras, para que no pierdan la forma por el peso. Repetimos el proceso hasta acabar con la masa. 

Después, disponemos una sartén con abundante aceite y la ponemos a fuego medio-alto, y cuando el aceite esté bien caliente vamos agregando las croquetas.

Colocamos una fuente con papel absorbente y dejamos que pierdan todo el aceite y... Ya están listas para comer!! 

Espero que os animéis a probarlas y que os gusten tanto como a mí!!

Hasta prontoooo!! :D