A las buenas tardes!!
Y a una receta deliciosa a la par que laboriosa!! Ensuciando cacharros a tope pero que rica!!
Os aconsejo leer bien la receta antes de empezar, porque lo ideal (además de tener toooodos los ingredientes) es no liarse con los pasos y su orden!
Y dejándonos de rodeos, pasemos a la receta!
INDREDIENTES
PARA LA BASE:
- 50g de mantequilla
- 1 cucharada de cacao en polvo
- 150g de galletas integrales desmenuzadas
PARA LA MOUSSE:
- 4 cucharadas de agua
- 4 cucharaditas de gelatina en polvo
- 115g de chocolate negro
- 115g de chocolate con leche
- 115g de chocolate blanco
- 125g de mantequilla
- 6 cucharadas de leche
- 6 huevos medianos (separar las claras de las yemas)
- 1/2 cucharada de pasta o extracto de vainilla
- 350ml de nata espesa
PREPARACIÓN
Forrar un molde cuadrado con film transparente de forma que quede cruxado y que sobresalga por los lados,
Derretir los 50g de mantequilla en un cazo, incorporar el cacao y diluir. Añadir las galletas y mezclar hasta obtener una mezcla homogénea.
Verter en el fondo del molde, creando una base con la ayuda de un tenedor o una cuchara, intentando que quede uniforme. Tapamos y guardamos en la nevera.
Empecemos con la mousse. Poner el agua en un cuenco con la gelatina en polvo. Dejar reposar 5 minutos, hasta que se disuelva. Calentar al baño maría durante 5 minutos, hasta que la gelatina quede transparente. Os aconsejo en este paso mantener la gelatina caliente, para que no cuaje y no tener que calentarla repetidamente.
Repartir los chocolates en 3 cuencos diferentes, con 1/3 de la mantequilla y 2 cucharadas de leche. Calentar al baño maría (sin que toque el agua el cuenco) hasta derretir completamente. Remover para integrar. Incorporar 2 de las yemas al chocolate, remover y retirar del fuego.
Repetir la operación con los 3 chocolates y añadir 4 cucharaditas de gelatina a cada cuenco.
Añadir la vainilla al chocolate blanco, mezclando con suavidad.
Batir la nata hasta formar picos suaves, Incorporar 1/3 a cada cuenco de chocolate. Montamos las claras a punto de nieve, y repetimos la misma operación que con la nata. Añadimos 1/3 de las claras a la preparación de los chocolates.
Incorporaremos las dos cosas con mucho cuidado, con movimiento suaves y envolventes pero sin batir. Os aconsejo hacerlo con una cuchara de madera o una lengua de silicona.
Si batís se perderá las esponjosidad que se ha creado montando la nata y las claras.
Vertemos la mezcla de chocolate negro en el molde, guardamos en el congelador durante 15 minutos.
Vertemos después la mezcla de chocolate blanco, y congelamos 30 minutos más.
Añadiremos finalmente la capa de chocolate con leche, y entonces refrigeraremos como mínimo 3 horas.
Desmoldar con mucho cuidado, sobretodo a la hora de retirar el film para pasarlo al plato o a la bandeja.
Yo corté con un cortador redondo, para hacerlo más curioso y decoré con láminas de chocolate negro y blanco.
Pero podéis cortar pequeños cuadraditos, a modo minimalista, o con cortadores de otras formas, más grandes o pequeños.
Mousse de tres chocolates lista!!
Lo ideal es guardarla en la nevera, para que no se desmorone.
Espero que os guste y que la pongáis en práctica!!